Enganchada A Uno, Solo A Uno
Se que coincide con el inicio de año, pero nada tiene que ver con un propósito de año nuevo, de esos que a los 2 meses ya dejamos a un lado. Más bien era un pendiente que tenía conmigo misma desde hace mucho tiempo.
Quería dejarlo, quería sacarlo de mi vida, deseaba tanto no sentir ansias por probarlo y cada noche era la misma historia.
Hubo días en los que sentía que era el día, por fin lo dejaría y por la noche mis deseos cada vez eran más fuertes y...caía, cedía una vez más. Sabía que no era bueno para mi, cada noche al volver a caer en la tentación el mal sabor que dejaba en mi boca, el olor que dejaba no sólo en mis manos sino en cada parte de mi me lo confirmaba, aún así, confieso que mis deseos eran más fuertes y yo...parecía no tener voluntad. Un vicio, una verdadera adicción relacionada más bien con una cuestión emotiva y de la psique por que era la única hora del día que en verdad se me antojaba sin poder resistirme. Tal vez era su compañía ó la sensación de estar por fin en casa después de un largo día, ó quizás el mágico momento entre él y yo por fin sólos en un espacio íntimo, en nuestro lugar, en donde podía mostrarme tal y como soy. Pudieron ser tantas cosas más, las que me hicieron estar enganchada a él.
Por fin terminé con él, lo dejé, dejé el único cigarro que me fumaba al día, el único al cuál accedía cada noche, una tras otra, el único que ponía a prueba mi resistencia y fuerza de voluntad, el único por el cuál hizo que me confrontara conmigo misma varias veces tratando de entender porqué no podía dejarlo si sólo era uno. ¿Que me daba este único cigarro?
Llevamos más de dos semanas sin fumarnos y me siento bien de haberlo hecho. No voy a decir que no ha habido una sola noche en que no lo extrañe pero...lo he logrado. Ahora sólo en mi queda un vicio...pero a medida que pasa el tiempo se va quedando atrás.
posted by Mónica López @ 5:39 PM
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